Pairing:AsaNoya
Serie:Haikyuu!!
Género: yaoi, Shonen ai, comedia romántica, drama.
El tiempo pasa muy rápido, cuando menos te lo esperas pasas de ser un adolescente, ensimismado en sus propios problemas, a convertirte en un adulto que carga con los de los demás.
-Hey ¿Me estas escuchando?
-...
-¡¡Asahi-san!!
Noya levanto el tono, para captar mi atención y conseguir sacarme de mi trance.
-Lo siento... Últimamente ando muy despistado ¿Qué decías?
-Estaba preguntándote sobre que te parecía que nos casamos el año que viene, llevamos saliendo 3 años y nunca me has propuesto nada relacionado con el tema.
-Tampoco es tan importante...
-No y no lo es, no por llevar un anillo y un papel vamos a demostrar que nos queremos más.
Noya parecía ligeramente molesto por mi apática y cortante respuesta.
-Escucha yo solo quiero que hagamos cosas juntos y forjar momentos memorables...
¿Tan malo es eso?
-No... Si lo entiendo Noya pero es que... A veces dudo...
Murmure para mi.
-Lo siento... No quería presionar te tampoco... Yo.. lo siento...
-Necesito dar un paseo a solas, nos vemos en casa.
Me marche de la cafetería dejando solo a nishinoya, con la mirada sería y la cabeza baja.
Tenía dudas, muchas dudas, casarme no casarme, esta bien que me case con el, temía no ser capaz de darle todo lo que se merece... Pero en parte ese es mi mayor hándicap, mi falta de confianza en mi mismo.
-Hey, ¿Vas a pasar de mi como si no me conocieras?
Una cálida y reconfortante voz, la cual me sonaba familiar se alzó por detrás mía, al girar me lo vi era Daichi quien me miraba con cierto desdén.
-Veo que sigues siendo igual que cuando estábamos en secundaria, ¿Verdad, Asahi?
-Tu también te ves igual.
-Dime, te ha pasado algo, antes traías una expresión deprimente.. Cualquiera te hubiera confundido con un alma en pena.
-bueno no creo que sea par tanto... Pero si, últimamente me siento desganado.
-¿Y a que se debe?
-Tengo dudas...
-¿Tiene que ver con la supuesta boda que aun no habéis celebrado?
-Si, es cierto que Noya quería una boda a todo trapo pero... Me da miedo no ser el hombre que lo haga feliz . .. Es decir el es un tío increíble siempre daba el 128% en todo lo que hacia y yo... En cambio me derrumbaba con facilidad y dependía de el para cumplir con mis obligaciones.
Daichi suspiro y cerró los ojos con desdén, para luego tomar aire de nuevo.
-Mira... Hay algo que se te escapa, la vida de pareja es diferente a la de soltero es decir, lo que tu dices no se llama dependencia se llama confianza, tu no dependías de Noya, sino que cuando te derrumbabas Noya siempre te animaba porque sabía que tu eras capaz de lograrlo ¿Acaso crees que si no fuera así se tomaría la molestia de animarte cada vez que
te derrumbabas?
-Eso...
-Noya te quiere, te ama con todo su ser aunque a veces seas un inútil y un llorón, y no vuelvas a dudar de sus sentimientos otra vez.
-Tienes razón, no volveré a dudar, gracias Daichi, y no te preocupes le pediré perdón a Noya.
Daichi sonrió satisfecho y se despidió de él.
Mientras asahi volvía a casa una idea cruzó su mente, se le había ocurrido una idea para pedirle disculpas a Noya y sorprenderle.
-Oye, Daichi, si soy yo, quería pediros un favor a Suga y a tí, si quedamos en un rato.
Mientras, Noya diamvulaba pensativo, meditando si su discusión con Asahi-había sido tan fuerte como para provocar que este se incomodase tanto y en como podría solucionar las cosas entre ambos.
-Joder... desde luego valla un hombre esta hecho... a veces me gustaría que el confiase un poco más en si mismo, me cuesta tener que ser yo el que confíe por ambos.
-¿Ese no es?
-¡Heeeey Noya-san!!!
Una voz ronca y tosca resonaba a lo lejos, esa voz gutural y salvaje era bien conocida por Noya.
-No puede ser... ¿Ryu?!
Efectiva mente era Tanaka, su antiguo compinche de cuando estaban en Karasuno, al verlo no pudo contenerse y acabo tirándose sobre el en un eufórico abrazo.
-Cuanto tiempo sin verte Ryu, veo que estas en plena forma macho.
-Lo mismo digo Noya-san, sigues igual de enérgico que hace años, ¿Qué tal va todo?
-Bueno... Es largo y tedioso de contar, ¿Que te parece si nos vamos a tomar unas birras y seguimos hablando?
-De puta madre hombre.
Pasar tiempo con Ryu, era la mejor forma de revivir sus antiguos recuerdos en Karasuno,además necesitaba hablar de sus problemas con alguien y como dijo un sabio, las penas compartidas son más llevaderas.
-Oye Noya-san ¿Cuanto tiempo llevabas con Asahi-san?
-Pfff tres años, y eso es solo contando después de graduar nos.
-Aaaah... es verdad que vosotros ya estabais saliendo cuando aún estabais estudiando en
Karasuno.
-No, no estábamos saliendo.....El muy cobarde me invito a salir y después de 4 meses intento pedirme que fuéramos novios ¡¡Pero le daba corte y tuve que esperar a que nos gradúasemos!!!
-O...oye...¿No estás bebiendo demás?
-Déjame beber Ryu, a veces un hombre necesita ahogar las penas en el alchohol.
Al final Noya calló rendido, tanto alcohol nunca es bueno, sin importar cuan profundas sean tus preocupaciones.
Tal y como Tanaka dijo, a Noya le gustaba Asahi desde hace mucho tiempo atrás, su historia se remonta varios años atrás cuando estos eran alumnos de Karasuno, en su temprana y dulce juventud. En aquel entonces Noya aun no tenía interés en el volley
-Hola enano, te has perdido?
-La escuela de primaria está en la dirección contraria.
-Tapón
-Nomo de jardín.
Esos eran algunos de los nombres que la gente solía ponerle para molestarle, pero, por desgracia para estos, a pesar de su pequeño tamaño, Noya contaba con unos reflejos y una fuerza fuera de lo común, y muchos de los valientes que se atrevían a buscarle las cosquillas acababan ingresados en el hospital con múltiples lesiones.
-Veo que tienes mucha energía...¿Nunca has pensado en emplearla en algo más
productivo?
Una voz de hombre tosca se dirigía a Noya por detrás se trataba de el entrenador Ukai el famoso entrenador del equipo de volley de Karasuno.
-¿A que te refieres viejo?
-Con tu estatura, tus reflejos y tu fuerza hay un lugar perfecto para ti.
-Mi estatura....hasta ahora es la primera vez que alguien me dice que mi estatura es conveniente para algo.
Así fue como Nishinoya fue entrenado y fichado por el propio Ukai para el equipo de volley de Karasuno, al principio su carácter de lobo solitario era un problema ya que los demás jugadores le tenían miedo y no confiaban demasiado en él, pero no todos eran así.
-Bienvenido al equipo, mi nombre es Sawamura Daichi, soy el capitán del equipo, y este es Sugawara Koushi, el vice capitán.
-Espero que consigas llevarte bien con todos Nishinoya-kun.
-Mucho gusto, Daichi-senpai y Sugawara-senpai.
-No es muy común que el entrenador fiche a alguien y que se tome la molestia de entrenarle personal mente, debes de ser alguien con un gran potencial oculto.
-Bueno..tengo buenos reflejos.
-¿Y en qué posición juegas?
-Libero.
-Dices que tienes buenos reflejos pero no es suficiente para jugar de libero, hace falta tener una gran resistencia y fuerza física.
Nishinoya sonrió desafiante.
-Puede que mi tamaño no se el adecuado pero os aseguro que soy capaz de hacer
grandes cosas si me empeño en ello.
-Jajajaja me gusta tu estilo, tienes agallas, mi nombre es Ryu Tanaka.
-El gusto es mio, no sabía que había más yankis en este equipo.
Al principio Noya y Tanaka se llevaban a su manera pero con el tiempo se fueron convirtiendo en hermanos inseparables.
-Por cierto hablando de potencial creo que hay alguien a quien deberías conocer.
Guiado por sus senpais Noya se dirigió al interior del gimnasio donde los demás jugadores estaban practicando sus tiros y sus jugadas, pero había uno en concreto que destacaba de entre los demás, sus saques eran feroces, sus mates demoledores y sus movimientos eran pura fuerza explosiva.
-¿Quién...Es?
-Ese es nuestro As, el jugador estrella, el que se encarga de llevarnos a la victoria con sus tiros imposibles de parar, Azumane Asahi.
La primera impresión que Noya tubo de Asahi-san, fue la de un jugador magnífico con un físico y unas jugadas espectaculares, en sus años más jóvenes era una estrella que brillaba con luz propia, no había barrera que se le resistiera y sus poderosas manos propinaban mates dignos de compararse con un reactor, solo de verlo rematar su cuerpo se estremecía.
-Pareces impresionado jajaja.
No era para menos considerado el as, pues aquel gigante podía propinar unos saques demoledores dignos de su título.
-Hey Asahi, ven que el nuevo libero quiere conocerte.
Asahi vino al momento de oír el llamado de su Vice capitán.
-Hola, mi nombre es Azumane Asahi, mucho gusto.
-(Es enorme...) Ah... Eh.... Nishinoya Yuu.
Por un momento se había quedado traspuesto, debido a la imponente estatura del famoso As.
-Que no te engañe su físico Noya, este tío es un llorón.
-¡Suga! ¡Aunque le susurres al oído puedo oírte perfecta mente!
-Perdooon jeje...
-Espero que podamos llevarnos bien, Nishinoya-san.
Noya dejo las peleas después de entrar al equipo y no sólo eso sino que su carácter se volvió más amigable, el participar en equipo con todos los demás le enseño a controlarse y a comprender los sentimientos de los demás,pero lo más importante, le ayudo a conocer a alguien especial, su senpai Azumane Asahi, el as del equipo, un estudiante de segundo con un carácter bastante afable y muy sensible.
-Esto... ¡Asahi-senpai!
Noya siempre que intentaba hablar con él acababa poniéndose nervioso y hablando le de manera seria y extremadamente formal, provocando que Asahi se sintiera un poco intimidado casi siempre que hablaba con él.
-¿N-n-Noya? ¿Necesitas algo?
-¿Tienes algo que hacer después de clases?
-Esto... ¿No por?
Noya ya había superado la peor parte, y está era su oportunidad de conocerlo mejor, solo tenia que pedirle salir, o eso es lo que el pensaba.
-¡Asahi!
Una voz femenina se acercó a ellos desde lejos, era una alumna de segundo año al igual que Asahi,y por algún motivo parecía bastante molesta con él.
-¿Sa-satoko?
-Me prometiste que me acompañarías a casa recuerdas?
-Ah... es cierto, lo siento.
Noya había sido demasiado lento, su oportunidad se había ido a tomar por saco, junto con sus posibilidades de conocer le mejor, y lo que más le molestaba, quien sería aquella chica
que le hablaba de esa manera a su senpai.
-Lo siento Noya, otra vez será.
-Si... hasta mañana.
Al día siguiente Noya quiso ser más rápido que aquella chica y se aseguró de llegar antes que nadie para asi poder quedar con el.
-¡Asahi-senpai! ¡Buenos días!!
-Waaaah... ¿Noya?! ¿Cuánto tiempo llevas aquí?
-Desde las 7.
-Pero si las clases no empiezan hasta las 9:30....
-Es que me he despertado con mucha energía y he decidido salir a correr un poco antes de clases.
Lo cierto es que no le había mentido pues, como estaba tan ansioso porque se hiciera de día acabo dando unas cuantas vueltas al barrio hasta que fuera la hora.
-Nunca te cansas eh...
-Es porque aún soy joven.
-Yo con tu edad no era tan enérgico jajaja.
-Venga ya senpai que solo me llevas un año y ya empiezas a hablar como un viejo.
-Ouch... ¿Por cierto que me querías decir ayer?
-Esto... después de clases... si tienes tiempo libre, me gustaría salir a dar una vuelta, ¿Te gustaría venir conmigo senpai?
Noya nunca fue un chico sensible y para el era bastante complicado expresar sus sentimientos hacia los demás de manera fluida,pero para su suerte Asahi era un chico bastante amable y comprensivo, y no le daba tanta importancia a los detalles.
-Oh, suena divertido, ¿A dónde quieres ir?
-Pues... (¿Qué debería decir le? La verdad es que es la primera vez que salgo con alguien, no tengo más amigos y no se como actuar en esta clase de situaciones...).
-¿Dime?
Se estaba poniendo nervioso, tenía que decir algo pero la verdad es que no sabía a donde ir ni que hacer ya que normalmente se iba directo a casa, pero pensó que igual no sería muy apropiado invitar a alguien que a penas conocía a su casa.
-Aaaagh....
-¡A-sa-hiiiii!
Una voz siniestra se escucho por detrás de Asahi, era Sugawara-senpai que había venido de manera oportuna.
-¡Suga-senpai!
-¡Waaaah!! Me vas a matar un día del disgusto...
-Que grosero ni que te espantase tanto el verme, por cierto ¿De qué estábais hablando los dos? Últimamente se os ve bastante bien juntos.
-Bueno pues Noya dijo que quería ir a dar una vuelta conmigo después de clases pero parece que no tiene claro a donde...
Noya agachó la cabeza algo avergonzado por aquella línea, Suga noto que algo no
marchaba bien y decidió intervenir.
-¡Arch!! ¡¿Por qué me has pisado?!
-Lo siento~ psss Noya, dejame echarte un cable.
Sugawara había hecho eso a propósito para distraer al pobre Asahi y así poder acercarse al oído de Noya, sin llamar la atención
-Bueno y ¿Por qué no venís con Daichi y con migo a la cafetería que han abierto en la estación? Seguro que os lo pasáis bien.
-Por mi suena bien ¿Tú que dices Noya?
-Esto...
Noya estaba confuso, no entendía bien que es lo que estaba sucediendo pero decidio aprovechar la oportunidad brindada.
-Me parece bien.
-Nos vemos a las 5, y por cierto Asahi como llegues tarde eres hombre muerto.
-¿¡Qué?!
Noya se dirigió después de clases al lugar que Sugawara senpai le había indicado, tal y como había mencionado allí estaba Asahi, esperándole, pero por algún extraño motivo no había ni rastro de Daichi ni de Sugawara.
-Hola Noya, como ves no hay ni rastro de los demás, por lo visto han decidido cambiar de planes sin avisarnos...
El móvil de Noya comenzó a vibrar.
"Suerte, ahora el resto depende de ti ;3 "
-Esto... ¿Vamos entrando?
-Claro, pero, no deberíamos esperar por los demás?
La cafetería era un lugar bastante moderno, de estilo occidental, contaba con una barra y con mesas individuales, la decoración de madera y el ambiente acogedor del local encandilaban los sentidos y te hacían sentir como si estuvieras en tu casa.
-Sentémonos allí al fondo.
Noya tomo la carta y comenzó a mirar los precios de los productos para poder pedir algo.
-¿Ya saben que van a tomar?
-Tomaré un chocolate caliente con nata.
-(Así que le gusta lo dulce...) yo... también.
-¿También te gusta el dulce?
-Si.. aunque me da vergüenza admitirlo debido a mi estatura se suelen reír....
-Lo mismo me pasa a mi cuando pido algo dulce dicen que ya soy muy mayor para pedir algo tan infantil o directamente me intentan poner un café solo...
-¿No te gusta el café solo?
-No... La verdad es que es demasiado fuerte para mi gusto jeje...
Noya estaba teniendo una conversación con su senpai, al fin tenía la oportunidad de conocer le mejor y de poder hablar con el sin interrupciones.
-Por cierto... hay algo que quisiera preguntarte Noya...
-¿Si?
-¿Esta es la primera vez que sales con alguien?
Su cara se había puesto pálida, no esperaba que le preguntase algo como eso, pero no quería mentir le así que le contó la verdad y fue sincero Con él.
-La verdad es que... no, no tengo amigos, todos me tienen miedo por mi mal carácter... pero al entrar en Karasuno me sentí comprendido y acogido, por una vez no me veían como a un monstruo, y eso fue lo que me incitó a cambiar...
-No veo por que debería cambiar, a mi me gusta como eres, y pienso que aunque seas una persona con poca estatura tu corazón y tu bondad son mucho más grandes que las de muchas personas altas.
-Senpai...
-Puedes llamarme Asahi si quieres.
-Asahi-san... la verdad es que...todo te lo debo a ti, tu fuiste el primero que me vio como a alguien amable... y que me acepto tal y como soy.
-No eres el único que tiene defectos, yo también los tengo... Suga me riñe a menudo por mi falta de agallas, dice que un As sin determinación no puede marcar y creo que en parte tiene razón...
-¡NO TE RINDAS!!!
Sin querer Noya se puso de pie y levanto la voz de manera exagerada, haciendo que la mesa temblara.
-L-lo siento.... yo... es solo que... no soporto la idea de pensar en que Asahi-san se rinda y deje su posición como as, el único que puede hacerlo eres tú, no importa cuantas veces falles no dudes de tu potencial, porque yo estaré para recibir todas esas bolas por ti.
-Noya...
Sus manos se tocaron con las de Noya haciendo y que este se sonrojarse y apartase su mano como si estuviera ardiendo.
-Aquí tienen lo que han pedido.
Salvados por la intervención del camarero, los dos corrieron un tupido velo ante aquella bochornosa situación, ambos estaban algo avergonzados y no eran capaces de mirarse el uno al otro.
-Será mejor que nos lo tomemos mientras aun está caliente, no crees.
-Oh...si.
Noya estaba temblando de nervios, no sabía que contestar, el nunca fue una persona sensible o con dotes para hablar, ya que siempre fue alguien muy sincero, y estaba cien por cien seguro de que si abría la boca acabaría diciendo algo inoportuno y posible mente muy bochornoso.
-Esto...Asahi-san.
-¿Huh?
-Tienes un poco manchada la cara.
-¿Dónde?
Noya se acercó y deslizó su dedo por su barbilla limpiando la de nata, pata luego chuparlo. Asahi estaba atónito ante tal acto, no se esperaba que Noya fuera tan directo a tal punto, provocando que este se sonrojase.
-Ah...¿¡Asahi-san?! E-esto....lo siento yo...no pretendía....
-No tienes que disculparte.
Asahi estaba muy avergonzado no sabía como reaccionar, su mente le decía que debía controlar sus emociones pero su corazón traicionero se aceleraba por momentos.
-Este... deberíamos ir yendo nos, antes de que se haga tarde...
-¡E-espera , Noya!
Asahi parecía algo decepcionado pero se resignó y despidió a Noya con una sonrisa.
Ambos se sentían confusos, sus sentimientos encontrados eran correspondidos, pero sus propias barreras emocionales no les permitían admitirlo, Noya quería a Asahi mas que nada en el mundo, el motivo por el cual había dejado atrás su vida de delincuente juvenil y su nueva luz en el camino. Y no estaba dispuesto a perder lo por nada ni nadie, aunque eso le costara todo lo demás.
-Tu eres Nishinoya Yuu, verdad? El gilipollas que se metió con mi hermano.
-¿Dices el que anda llamando pitufo a la gente? ¿El mismo que se metía con el tamaño de mi rabo diciendo que más que una lupa lo que hacía falta para verlo era un telescopio?
-El mismo.
Noya se había enfrentado a un sin fin de maleantes en sus años de delincuente, le encantaban las peleas a puño desnudo, y más cuando sus contrincantes eran descerebrados con la cabeza llena de serrín.
-Si lo que buscas es venganza lo siento pero ahora mismo estoy ocupado, si me disculpas...
Intentó escabullirse pero no le resultó sencillo, no tuvo oportunidad de hacerlo, aquel desgraciado lo cogió del cuello de la ropa y lo levantó en el aire dejando lo colgado contra la pared.
-A mi las coñas no me gustan niñato, habla me en serio sino quieres cobrar, ¿Lo captas?
-Si vas a intimidar me podrías haberte lavado los piños antes joder, que apestas a porro.
-Noya fue golpeado en la cabeza con fuerza, no tenía pensado romper su palabra, le había prometido a sus compañeros no volver a luchar ni a pelear, y pensaba cumplir dicha promesa aunque su vida dependiera de ello.
-Ya te cansarás.....aahggh.
-Cuando acabe contigo lo siguiente será ir a por tus patéticos compañeros, ¿Qué pensarán de ti después de que reciban la paliza del siglo? Jajajajajajaja.
Noya tomó su brazo apretándolo con fuerza.
-Suelta me maldita pulga. ¡QUE ME SUELTES!
Noya comenzó a retorcer le el brazo provocando le unos gritos de dolor ensordecedores.
-Puedes llamarme pulga, pitufo, pegarme, meterte con el tamaño de mi rabo, incluso chismorrear sobre mi orientación sexual, pero como se te ocurra ponerles un dedo encima...el hospital será lo mejor que te pueda llegar a pasar.
De un fuerte y contundente cabezazo Noya lo derribó haciéndole sangrar por la nariz.
-¡Eres un maldito monstruo!!!!
-Eso te enseñará a no meterte con Karasuno y su guardián protector.
-Noya....
Había logrado defender a su equipo de la amenaza de un delincuente hostil y peligroso pero, el precio a pagar fue demasiado grande, aquella heroicidad le costó, su puesto como líbero y le proporcionó una sanción grave con unos meses de suspensión.
-Noya que has hecho...
-No tenía otra opción iba a haceros daño a todos, la única manera de que entiendan es con una buena hostia bien dada.
-Noya...no puedes recurrir a la violencia para solucionar las cosas eres un deportista federado, no puedes permitirte entrar en peleas callejeras, eso no es propio de ti.
Para él, solo era un delincuente buscando pelea, no entendía el sacrificio que acababa de realizar, para él lo más doloroso no fue el ser expulsado, sino que la persona por la que más había luchado le estuviera dando la espalda cuando más lo necesitaba.
-Entonces...supongo que ya no necesitaré esto, los delincuentes no tenemos derecho a formar parte de un equipo.
Noya tiró su uniforme dejándolo ensuciarse de barro y polvo ante los ojos del decepcionado Asahi.
-Noya...
Karasuno estaba bajo mínimos, con la pérdida de su guardián, y de su as de manera consecutiva, y no solo el nivel, los ánimos también habían decaído considerable mente, nadie tenía ganas de seguir.
-No entiendo como ha podido pasar esto... ellos dos se llevaban tan bien..y ahora, todo se
ha ido a la mierda.
-Daichi....
-Esto...disculpad, ¿está Azumne Asahi?
Aquella misteriosa chica que parecía tener cierto interés en Asahi. había irrumpido en el gimnasio, pero para su sorpresa la escena que se encontró fue la imagen de un equipo en sus últimas y con la moral por los suelos.
-Te conozco, eres esa chica , Satoko-chan, la que siempre anda con Asahi verdad.
-¿Ha pasado algo? Asahi dejó de asistir a clases hace un tiempo y tampoco contesta las llamadas, pensé que igual vosotros que sois sus compañeros de grupo sabríais algo más.
-Supongo que has oído los rumore s¿No?
La gente se aburría mucho y no tardaron en salir rumores sobre Noya, que le habían expulsado por herir gravemente a un alumno de otra escuela, que si le habían expulsado por haber casi matado a una persona, y el mejor de todos, que Asahi y él estaban enzarzados en una relación clandestina, y que el motivo de su expulsión fue porque este hirió gravemente a Asahi siendo este el motivo de su consecutiva baja.
-Esos rumores son muy crueles, no conocí a Nihinoya-kun, pero no creo que él sea capaz de algo parecido, Asahi siempre me contaba lo mucho que le gustaba pasar tiempo con él, y siempre que hablaba de él sonreía, como si todas sus presiones y preocupaciones se fueran solo con pasar tiempo con él, es imposible que nada de eso sea siquiera cierto.
-Eres una chica muy amable, Satoko-chan.
-Pero quiero ayudarles, se que en su corazón ya no hay sitio para mí ...pero lo quiero, y quiero que sea feliz, quiero ver esa sonrisa resplandeciente una vez más, a como de lugar, no quiero ver como se hunde más al punto de que ya no pueda reconocerle, ¡Por favor, ayudadme os lo ruego!!
Suga y Daichi se miraron con indecisión, no tenían claro como podrían ayudarle exactamente pero en ese instante, apareció Tanaka, con un tono de voz serio, quien se dirigió directamente a Satoko.
-Si lo que quieres es ayudarles, entonces toma.
-¿Qué es...Esto?
-Es la dirección de Nishinoya, si vas ahora es posible que aun lo encuentres en casa, vete y di le lo que sientes ,él es un tío legal, y no se merece pasar por todo esto, él es un héroe, dio su cara por nosotros y ahora todos le están dando por culo.
Satoko asintió y tomó el papel con determinación, estaba dispuesta a ir al mismo infierno con tal de recuperar a Asahi, la casa de Nishinoya estaba un poco apartada del instituto y le tomó más tiempo del que pensaba.
-He tardado demasiado y ya se está haciendo de noche...
-¿Puedo ayudarte en algo?
Pero para su suerte allí se encontraba Nishinoya quien volvía de hacer unas compras.
-Eres...Ni...n..shi....oya......aaaahhh.
-Woa, espera, eres de Karasuno verdad? Llevas aun puesto el uniforme y todo...espera ¿¡Me estas diciendo que llevas echo todo el camino hasta aquí tu sola a pie?!
Noya le invitó a pasar y le dio un vaso de agua para que pudiera recuperar las energías, al principio no la reconoció pero cuando este iba a proceder a presentarse calló en la cuenta, se trataba de aquella chica que siempre estaba con Asahi, la cual estaba claro que tenía sentimientos hacia él.
-Mi nombre es Satoko-
-Ya se quien eres, eres aquella chica que siempre estaba con Asahi-san...
¿Vienes a hablar sobre los rumores?
Noya agachó la cabeza con resignación.
-No, bueno si, pero no vengo a atacarte, vengo a decirte que no creo absolutamente nada de lo que están diciendo , y creo que todo esto es una conspiración contra vosotros dos, si juntas todos los rumores ninguno tiene pruebas ni fundamentos para sostenerse, y cada uno es más absurdo que el anterior, pero si que hay una cosa que es cierta detrás de todo esto, que vosotros dos, Asahi y tú, teníais una relación muy estrecha.
-¿Yo? Jajajajajajaja por qué iba a querer estar con un fracasado como él, yo soy un lobo solitario, que jamás se junta con idiotas.
-¡MENTIRA! ¡Deja de negar la realidad!
Noya apretó los dientes y le contestó gritando.
-¿¡QUÉ PARTE DE QUE YO SOY EL CULPABLE DE TODO NO ENTIENDES!!!!?
¡¡NO METAS A ASAHI-SENPAI EN ESTO!!
-¡No me importa que me grites, yo se que solo estás mintiendo porque temes hacerle daño a Asahi, pero así nadie es feliz, tu sufres, Asahi se siente dolido y yo no puedo verlo así, ¡¡¿Cómo quieres que deje las cosas como están?!!! él te ama más que a nadie en este mundo, yo soy su mejor amiga y por eso quiero que él sea feliz, es un inútil, un cobarde y un idiota, ¡PERO NO SE MERECE QUE LE HAGAS ESTO!!!
Las lágrimas brotaron de sus ojos , no podía resistirlo, simplemente no podía quedarse callada y hacer como si nada de estuviera pasando mientras todos estaban sufriendo. Con toda la seguridad que poseía agarró a Noya del cuello de su camisa y le miró a los ojos con fiereza.
-Di me a los ojos eso otra vez y atreve te a mentirme.
-Yo....
-Di lo.
-Yo quiero mucho a senpai, desde que lo vi por primera vez en el gimnasio, siempre quise conocerle mejor, pero nunca tuve la oportunidad...y cuando empezamos a acercarnos temía que mis problemas le salpicaran por eso...por eso fingí que lo odiaba, quería protegerle, de mi mismo, pero ahora ya es muy tarde para recuperar la oportunidad.
-No es tarde, si de verdad lo quieres ve a por él, si no lo haces pronto alguien te quitará la oportunidad, yo te apoyo Nishinoya.
La ardiente e inesperada determinación de Satoko avivó la llama dentro de Noya y le devolvió las agallas para enfrentarse a la vida una vez más, no iba a vacilar, esta vez nada ni nadie lo apartaría de su lado.
Impulsado por sus sentimientos reavivados se dirigió hasta la casa de Asahi en plena noche, y una vez allí llamó a la puerta esperando a que este contestara, pero no hubo respuesta, tal y como había dicho Satoko antes, estaba tan deprimido que no contestaba a nadie.
-¡¡¡ASAHI-SENPAI!!!!
Noya tragó aire y gritó como nunca antes había hecho en su vida, ya no le importaban las consecuencias ni lo que los demás pensaran solo quería hablar con Asahi y decirle lo que sentía de una vez por todas.
-¿N-noya?!
-¡Asahi-san!!!
Ambos comenzaron a llorar, las palabras se entrecortaban y los sentimientos se mezclaban aquella noche frente al portal de la casa de Asahi ambos se abrazaron y se sinceraron el uno con el otro.
-Yo...tengo que contarte algo también Noya....al principio me costaba creer lo...pero al pensar en que todo lo que habíamos pasado juntos hubiera sido una farsa, me dí cuenta, de lo que siento en realidad, y no quiero pasarme toda la vida llorando, quiero ser un hombre digno de estar con alguien tan increíble y valiente como tú.
-No digas eso, ya eres un hombre muy valiente y confiable, lo que necesitas es a ese alguien que te apoye cuando más lo necesitas, alguien que nunca de su brazo a torcer y que sea capaz de ponerte en cintura.
Noya agarró del cuello de su camiseta a Asahi y lo besó con pasión.
-Y ese alguien soy yo.
Después de aquello las cosas volvieron a la normalidad, gracias a la intervención de una joven enamorada los dos consiguieron deshacerse de sus cargas emocionales y aceptar así sus sentimientos mutuos.
Los meses pasaron y la suspensión de Noya se terminó, una vez que este volvió a clases comenzaron a pasar más tiempo juntos.
-No-n-n-Noya-san... esto,querrías....
-(Venga di lo llevo esperando varios meses a que me lo pidas!!!)
-Querrías....
-¿Si?
-¿¡Querrías tener una cita conmigo?!
-(¿¡Sólo era eso?!!!!!) C-claro...
Esa fue la primer vez que Asahi se declaraba a Noya, pero por desgracia sus nervios estropearon su confesión.
En su primera cita ellos fueron a ver un partido de béisbol, al que Noya llevaba tiempo queriendo ir, Noya estaba en su salsa pero Asahi se sentía un poco fuera de lugar, ya que todo el mundo estaba gritando y armando bronca.
-¿Te lo has pasado bien hoy?
-Si llevaba tiempo queriendo ir a ver a los Tigers, gracias por traerme Asahi-san.
-No hay de que.
-Por cierto.
Noya se volvió a acercar a Asahi una vez más antes de marcharse y le plantó un beso de despedida a modo de agradecimiento por la cita.
-Gracias por esforzarte tanto por mi, te quiero, ¡Y la próxima vez invito yo!!!
La segunda cita que tuvieron fue un poco más tranquila, fueron a ver una película juntos, Asahi no estaba seguro de cual ver así que Noya acabo escogiendo por él.
-¿Qué te parece esta?
-¿Una comedia?
-Es que a estas horas las pocas películas aparte de las de comedia son las de terror y las pornográficas...
Asahi se puso rojo como un pimiento, y comenzó a tartamudear.
-E-entonces la de comedia mejor...
-Jajajaja que guarrete estas hecho Asahi-san, la próxima iremos a ver una porno.
Susurró Noya a su oído provocando que este estallase de vergüenza poniéndose aún más rojo.
No dejaron de reír en toda la película, aquel día Noya y Asahi se lo pasaban realmente en grande, pero lo que más disfrutó fue verlo en compañía de Asahi.
Tras esa última cita la cosa se pauso, por un tiempo, Noya llego a pensar que Asahi ya no quería estar con el por lo menos hasta el día de su graduación, cuando por fin tras meses de espera.
-Noya...Crees que cuando nos graduemos podremos estar juntos?
-Pues claro que si bobo, te seguiré a todas partes pase lo que pase.
-Te quiero.
-Y yo a ti Asahi-san.
De vuelta a la realidad....
-Mmmmm~
-Valla así que esta bebido eh.
-Si, siento no haber podido detenerle Asahi-san.
-No te preocupes, por ahora lo acostare y prepararé un basó de agua para cuando se despierte.
Asahi a pesar de ser alguien poco decidido cuando se trataba de Noya se tornaba una persona completa mente diferente.
Tanaka se despidió y de marcho dejando solos al ebrio Nishinoya y al preocupado Asahi.
-Madre mía... a tu edad y bebiendo hasta perder la cabeza...
-Asahi.... Mmmh....
Noya estaba hablando en sueños.
-Jaja, ¿Así que sueñas conmigo eh?
Asahi acarició la mejilla de Noya con dulzura, mientras se recostaba a su lado.
A la mañana siguiente Noya se despertó aturdido y algo cansado, pues la resaca siempre trae esta clase de problemas.
-Joer..si lo se no me pido tantas birras seguidas....agh que dolor de cabeza...¿Eh?
¿Aspirinas y... Agua ?
Noya se tomó la medicación para el dolor y se incorporó buscando con la mirada a Asahi, quien se encontraba en la cocina limpiando los platos.
-Hola Asahi-san... ¿Ayer dormí mucho?
-Ya estas despierto, espero que hayas podido descansar bien.
-Sobre la discusión que tuvimos ayer... Quería decirte que... lo siento,se que te cuesta mucho dar la cara y creo que no tuve en cuenta eso y que a pesar de tus problemas siempre te has sacrificado para hacerme feliz.
Y eso a que viene ahora?
-Bueno...
-Venga no le des tantas vueltas, por cierto tengo algo que decir te pero antes quiero que vallamos a un sitio.
Ambos se vistieron y se marcharon al lugar donde todo empezó, el lugar donde se conocieron y pasaron los mejores años de su dulce juventud.
-¿Qué hacemos en Karasuno?
-Ya verás tu solo entra en el gimnasio.
Asahi empujó levemente a Noya forzandole a entrar.
-Ya voy, ya voy, no me empujes hom-.... ¿Pero que...?
Al entrar pudo ver una inmensa pancarta decorada.
-"NOYA ¿QUIERES CASARTE CONMIGO?"
-Esta vez voy muy enserio, no pienso dudar más, porque tú eres la persona a la que quiero dar lo mejor y con la que quiero pasar el resto de mis días.
-Asahi - San...
-Por eso...
Asahi metió su mano en su bolsillo y se arrodilló sobre una pierna sacando una pequeña caja roja.
-Acepta mis sentimientos Noya.
-¿Si que te ha costado eh? ¡Si que quiero!!!
Unos meses más tarde la boda se celebró en el mismo lugar donde este le pidió su mano, todos los antiguos miembros del equipo el entrenador y las managers ayudaron a organizar el evento y tal y como Noya quería fue una fiesta que nadie olvidaría jamás.
-Asahi-sa... No, Azumane, buenos días.
-Buenos días Yuu.
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